Juana la Loca, uno de los grandes referentes de la gastronomía madrileña, invita a descubrir una nueva forma de saborear su cocina con un menú degustación pensado para ir mucho más allá de su famosa tortilla de patatas. Ahora en su nueva y sofisticada ubicación en la calle Recoletos 10, en pleno barrio de Salamanca, el restaurante propone un viaje sensorial donde cada plato es una historia, una textura, un recuerdo reinterpretado con creatividad.

En un entorno que respira diseño, arte e historia, Juana la Loca ofrece una experiencia gastronómica completa en la que el pintxo alcanza su máxima expresión. Con influencias vascas, japonesas y peruanas, este menú es una muestra exquisita de cómo la tradición puede reinventarse sin perder autenticidad. La propuesta arranca con un tiradito de corvina con trufa y aliño cítrico, que despierta el paladar con su frescura y profundidad. Le sigue un delicado buñuelo de espinacas, seguido de un “ravioli” de boletus que encapsula la intensidad del bosque en un solo bocado.

El recorrido continúa con una creación tan sorprendente como adictiva: Hatzu tuna, un sándwich de lomo de atún rojo empanado en panko con mayonesa de kimchi y huevas de trucha, que representa a la perfección el mestizaje culinario que define la propuesta de la casa. A mitad de camino, aparece la reina, la tortilla de patatas de Juana la Loca, un icono por derecho propio que, sin necesidad de presentación, se convierte en el punto de inflexión del menú.

El viaje sigue con un rabo de toro deshilachado con salsa, plato cálido, meloso y lleno de matices, que aporta profundidad y arraigo. Para cerrar, un refrescante sorbete de piña con espuma de coco limpia el paladar y deja una última nota de ligereza. La experiencia incluye dos bebidas por persona —vino, cerveza o refresco—, pensadas para acompañar y elevar cada fase del menú.

Más que una comida, este menú degustación es una puerta de entrada a la verdadera identidad de Juana la Loca: una cocina pensada para emocionar, sorprender y celebrar el sabor en todas sus formas. Desde su barra de acero y bronce envejecido hasta los retratos de mujeres icónicas que decoran sus paredes, cada detalle en Juana la Loca habla de una visión que combina elegancia, vanguardia y respeto por el producto.

El menú estará disponible para grupos a partir de seis personas y tendrá un precio de 45 euros por comensal. Esta propuesta ha sido cuidadosamente diseñada para ofrecer una experiencia gastronómica completa, ideal para celebraciones o encuentros especiales.

Este nuevo capítulo en la calle Recoletos no solo consolida el legado de Juana la Loca en el panorama gastronómico madrileño, sino que lo proyecta hacia el futuro. Porque en Juana la Loca, la tortilla es solo el principio.